Eterna luchadora por memoria, verdad y justicia, que tu partida sea en el día de la Soberanía Nacional es totalmente coherente con tu vida y lucha.
Quienes mueren por la vida no pueden llamarse muertos y tu legado vivirá en cada militante que ponga su cuerpo, mente y corazón por los 30 mil y en la construcción de una Patria liberada.
Gracias por siempre a la compañera que se transformó en Madre de todo el pueblo argentino.