Desde Feduba Sindicato de Docentes de la UBA expresamos nuestro repudio a la decisión de los jueces Mahiques, Ledesma y Yacobucci de concederle la prisión domiciliaria a los genocidas Etchecolatz, Firpo y Ocampo.
Ni olvido, ni perdón.
El único lugar para los genocidas es la cárcel común.