El viernes 4 de junio, en el marco del Diploma Superior y Programa de Actualización en Docencia Universitaria (PADOC), Andrés Tello (Universidad de Valparaíso, Chile) brindó una charla para reflexionar sobre la premisa que indica que “todo el conocimiento está en internet”.
Tello ubicó a dicho slogan bajo un “ciberoptimismo” que ha incidido en las transformaciones más contemporáneas de la Universidad y en sus modos de producción del saber. Esta perspectiva afirma que gracias a internet el desarrollo del conocimiento es más accesible, transparente y democrático. Según este discurso, la Universidad debe también globalizarse y acomodarse al modelo de las redes y su aparente horizontalidad. Sin embargo, estas ideas implican una omisión de las condiciones materiales de explotación del saber bajo los complejos entramados sociotécnicos dispuestos por el nuevo régimen capitalista de acumulación.
Como especialista en aspectos políticos de las nuevas tecnologías, Tello alertó sobre como la expansión hacia universidades globales y corporativas es indisociable de las transformaciones actuales de las tecnologías de archivo digital. Actualmente contamos con una gigantesca e inédita multiplicación de los registros de información que supone una virtualización que puede desestabilizar el habitad universitario.
A partir de la digitalización del saber y del surgimiento de nuevas tecnologías, nos encontramos ante una modificación del territorio universitario que es físico, semiótico y pragmático. “Para comprender este radical trastorno es necesario entender cuál es la relación entre archivo y universidad, en tanto el archivo es el soporte del conocimiento que operaria como un a priori histórico de nuestra época. En el siglo 21 este fenómeno se reordena ya que las tecnologías de archivo generan otro tipo de relación con el saber”, explicó.
Las tecnologías digitales de registros de datos, que son centrales en el capitalismo informático, son las que van a transformar al campus universitario y la mercantilización del saber. Si bien la información y el conocimiento no son sinónimos, la colosal cantidad de información registrada gracias a las tecnologías de archivo digital y su consecuente valoración económica, funcionan como el marco de producción de cualquier tipo de conocimiento.
Asimismo es necesario mencionar el avance de la privatización del conocimiento de nuestra época y el ejercicio del poder arcóntico sobre los archivos digitales que posibilita un nuevo ciclo de acumulación capitalista. De este modo se altera la tradicional forma de generación del conocimiento a partir de la investigación científica y académica.
En el poder arcóntico que se ejerce sobre los archivos digitales nos encontramos con dos polos: el registro de patentes que atraviesa a todas las universidades globales y la privatización de las grandes bases de datos
Dentro de este panorama es importante destacar ciertas formas de resistencias a este escenario, como los motores de búsqueda de artículos académicos que “utilizan a contrapelo las tecnologías digitales, generando disputas en torno al acceso de los datos y desbloqueando las restricciones del uso del conocimiento científico”. Estas prácticas logran remover las barreras instaladas en torno a la ciencia, preservando las formas colectivas de producción de conocimiento frente a los dispositivos de privatización que se han enquistado en las universidades actuales.
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